Pero tengo que compartir una de mis últimas experiencias positivas. Debo hacerlo para la dignificación y mejora de la maltrecha imagen que, nadie duda, tenemos en la sociedad acerca de los políticos, en general. Pero, por supuesto que no todos los políticos son iguales.
Una experiencia que estoy disfrutando actualmente es la de haber recibido la solicitud formativa de alguien que podría ser candidato en las elecciones de dentro de más de tres años y que pertenece a un destacado partido político.
¡Qué diferencia con algún que otro político advenedizo que afirma que él no necesita aprender nada en este campo de la Comunicación!
Pues bien, este hombre quiere formarse en Oratoria y Comunicación Pública «ahora», no dentro de casi cuatro años cuando se acerque el momento de las campañas políticas, las entrevistas y los mítines, no. Ha empezado a hacerlo con una previsión inédita, algo a lo que no estoy acostumbrado.
Y, además, lo hace duplicando las horas lectivas del módulo avanzado habitual que imparto a los políticos. ¡Es bellísimamente flipante!
Esta singularidad me encanta, por ser positivamente inédita. Jamás me había sucedido. Lo común es que se preparen recién elegidos tras las elecciones o unas semanas antes de iniciarse las campañas políticas previas a estas.
Me encanta sorprenderme y comprobar que no todos los políticos son iguales. Que los hay regulares, buenos, muy buenos y —como es este caso— excepcionales.
Este futuro candidato no solamente está formándose y mejorando sus cualidades comunicativas, ¡ni mucho menos! A la par, está honrando y dignificando la política y, sin él saberlo, también la Oratoria y la Comunicación.
Alguien capaz de conocer sus limitaciones, consciente de que necesita un apoyo formativo personal, que desea que la sociedad y su equipo de trabajo cuenten con un líder con capacidad, preparación y nivel político —aun sin que apenas veamos en el horizonte las próximas elecciones—, una persona que encuentra un hueco para recibir clases dentro de su ya apretada agenda, alguien así es una persona muy especial que merece mi total respeto y admiración.
Qué bien nos vendría que, igual que está haciendo él, todos quienes son responsables de dirigir nuestra sociedad, se tomaran con el mismo nivel de entrega, pasión y respeto a la ciudadanía, el desarrollo integral de su gestión.
Comentarios
Publicar un comentario